Los neuromoduladores han revolucionado el mundo de la medicina estética. Estos agentes, conocidos por sus aplicaciones en la reducción de arrugas y el tratamiento de bruxismo, ofrecen soluciones efectivas y mínimamente invasivas. Pero, ¿qué son realmente y cómo despliegan su magia para suavizar arrugas y rejuvenecer la apariencia facial?